El Congelador

Las Góndolas Las gondolas son como botes, pero son dirigidos por pilotos que a su vez están vestido como mimos. Más que pilotos son remeros y más que remeros son capitanes. Estaba en una góndola transitando los canales, que algún día fueron rios pero ahora son canales. La ciudad crece y lo que es charco se transforma en laguna. Y aunque este en una góndola transitando con la mujer que amo este viaje no es mío ni me pertenece. Me parece más como un diorama macabro donde soy una especie de enano guiado por un alguien que da dirección a las aguas de ese canal que es la mentira y es la estupidez. Mujer mujer. Hombre hombre. En la mitad del recorrido mi la mujer habla con el gondolero. Preguntalas minucias del negocio naval. Cuantos clientes hay, qué tan bueno es el negocio. Yo no se ni me importa pero al mismo tiempo pienso en lugares bonitos que no estan en Venecia y que no están transitados por góndolas dirigidas por capitanes, remeros ni gondoleros. Porque son lugares estáticos. Estáticos como me imagino el paraiso. Quietos. Hablo de todo esto con esta mujer, que empieza a descubrir una serie de enfermedades ¿Es que acaso estas hablando de nosotros? ¿Es que sufres de celos? - No sufro de celos por el gondolero, piloto, capitán remero. Cuando era niño fuí con mi padre a buscar regalos para la navidad. En ese momento no lo supe, ni ahora lo se con precisión, pero creo que mi padre estaba más que impulsado por la simple generosidad hacia sus hijos, a hacerle ver a los otros que también podía parecerse a esos padres que regalan algo a sus hijos por una misteriosa convicción de la paternidad generosa. lo único que tengo o puedo decir ante esto es: ¿A quién le importa? ¿Gondolero. hay una parada cerca? No quiero vomitar estos canales que de por sí ya huelen a vómito. Caminante sí hay camino, y esta en la rivera.